Estos días todo se dio la noticia de que Kellogg’s iba a sacar una línea de cereales con sabor a churros, rollos de canela, y el más llamativo: El cereal Pan de Muerto.
Como amante de los cereales y del día de muertos, no me podía quedar con las ganas de probarlos y acá mi opinión.
Kellog’s sabe donde pegarle a la nostalgia del mexicano, que se acrecenta con el encierro, y decidió que sus empaques iban a ser color papel estraza, para que sientas que estás llevándotelos directo de la panaderia. El ansía de probarlas es demasiado grande, por lo que estoy presintiendo que no vivirán el hype que se les ha hecho.
Y de hecho no pasó, abro la bolsa del cereal y la cocina se inunda del olor dulzón de la esencia de vainilla, hasta te mareas un poquito. Saco unas cuantas con la mano, parecen croquetitas para perro. Así sin leche saben a vainilla, muy crujientes eso sí.
Va la hora de la prueba definitiva, ya en nuestro tazón (de vampiro obviamente) y con la leche, notamos que se suavizan con demasiada rapidez, esto le afecta al sabor, sabe como a pan de mantequilla remojado, de hecho huele y sabe un chingo a mantequilla, no está mal. Al final tiene un regusto a azahar, como el de los panes caseros o de panaderías pequeñas, eso le suma. Definitivamente sabe mejor cuando está crujiente y no remojado.
Calificación final: 7/10.
De los tres cereales sólo compré el de churros y pan de muerto. Los encontré en Walmart (Guadalajara) a $37 pesos la caja.
Al parecer apenas salió este fin de semana, así que puede ser posible que todavía no lo encuentres en todas partes.
Síganme en Twitter, estoy como @CM_Pepper, que por allá les contaré mi opinión del cereal sabor a churros.